tres Poemas de hacia / lo que queda por ganar de mell rivera díaz

Los tres poemas de “hacia / lo que queda por ganar” de Mell Rivera Díaz están también atrapados en ese momento de crisis, en la pérdida de las certezas juveniles. Ojalá la sabiduría arbitraria de una abuela pudiera servir en la poesía de Rivera Díaz de balsa, pero no hay tal cosa. Estos poemas miran desde el presente de la crisis al presente y sienten que se sofocan. Razón tienen, porque la condición puertorriqueña cada vez tiene más de naufragio que otra cosa. Y, sin embargo, la isla aprieta, pero no asfixia. En uno de los poemas, unos versos de la amada quiebran la bruma y se ofrecen como oasis, y tal vez se trate de eso, o sea eso lo que nos quede, el verso ofrecido como caricia.
— Los editores

Mell Rivera Díaz (1994, San Juan) es poeta y estudiante doctoral en la Universidad de California, Irvine. Es autor de un chapbook titulado Jugar a lo efímero (2017) y ganador del Premio Escritura Revuelta (2021) ––gestionado por la Universidad de Houston–– por su manuscrito titulado lo más increíble de la vida. En el 2022, Educación Emergente publicó el poemario de ir sé que vine.


tres Poemas de hacia / lo que queda por ganar

📖

en el avión de camino a Qatar es mi
cumpleaños de nuevo / me apresuro
a través del día con velocidad /
posmodernista / pasa demasiado
en un minuto / y sin embargo uno pasa /
el día entero sentado / pensando en los
poemas que hay que escribir / el avión
a Qatar se siente como un episodio de
Star Trek / y hay algo maravilloso /
de estar ante cosas que me hagan sentir /
de nuevo / como un jíbaro de Malpica /
ante lo inesperado del mundo / aunque sea
/ otra vez / en la infinidad de pantallas /
el Mediterráneo lo veo en la camarita / debajo
del avión / en un solo poema /
se encuentra Ithaca / y sin embargo /
en la retracción de la pantalla / la luz /
centelleando sobre las olas te lleva / a
imaginar / estrellas retrayéndose en la pantalla
del Río Grande / cruzando el puente / en un
solo poema /
Júlia de Burgos / Carolina / Puerto Rico / al
mirar de nuevo la camarita pasa por Túnez /
en Algeria estuvo Cervantes, y Burroughs, y
Algarín, y Fanon, y yo solo paso / por ellos /
como la pantalla / con la velocidad de /
el año pasado /
en mi cumpleaños estaba bien en la mala /
escribí un poema / de la experiencia / me gané
un premio / y sin embargo / en este día
me siento bien estando aquí / llorando / en
cambio / de felicidad / pensando / en un solo
poema / hace años no escribo un buen poema
de amor / o hace tiempo que no leo escrito /
el nuevo gran poema de amor / al llegar a
Doha / mi jabibti / me manda un poema / de
amor que me escribió /
para mi cumpleaños / donde
se imagina una vida conmigo / en un solo
poema / sobrepasa el día / las lágrimas /
cualquier cosa que yo pueda decir / la verdad
me siento muy feliz / donde quiera en el
mundo que voy / de sentir de nuevo maravilla /
imagínate:
¡que me escriban un poema / a mí!

 
 

📖

me estaba quedando dormido / o quería
dormir pero me lo impedía la percusión de
los fuegos / artificiales / pasé las últimas
horas del año en la cama / pensando en cómo
cada palabra te toma un momento una detrás
de la otra / estás aquí conmigo en el proceso /
en oposición a las pinturas de mi amigo /
imagen muda que aparece y te acompaña /
más allá de un momento tras el otro / se
solapan las líneas en un instante / se alojan
en un lugar muy dentro / te sangran los
segundos de color / como una percusión /
fuera de tiempo / por más que cierres los ojos /
no dejas de ver / el tiempo radiante de la
pintura / quemando en ti como luces
de fuego / artificial.

 

📖

al llegar a la fila del servicarro de Taco Bell /
recuerdo bien por qué solía escribir tantos
poemas en el carro / como al minuto
quince de todavía estar en fila / no llevaba
ni diez minutos de pisar la isla / cuando mami /
se encabronó con un conductor en la carretera
al decir / nadie sabe guiar / en este país
de mierda / la señora iba bien lento / llovía /
la Baldorioty todo baches / algunos minutos
antes de tocar la tierra / observo la lluvia
caer sobre el país de mierda / y me pregunto
qué hago aquí de nuevo / y cuando me voy
algunos minutos después / de aterrizar
la señora detrás mío / en el avión
menciona que viene a la isla cada diez años /
pero ha cambiado mucho / el país /
de mierda / ha llovido tanto / desde que tengo
consciencia / desde que escribí tantos poemas
esquivando boquetes que deja la lluvia /
y entre tanta lluvia también mis lágrimas /
caen aquí en el país de mierda / algunos
minutos antes de llegar a la fila del Taco Bell /
voy guiando de nuevo por la Baldorioty / casi
a noventa millas / voy llorando preguntándole
en voz alta a los aviones / qué carajos hago
aquí de nuevo / si no es depositar mis lágrimas
como una nube / lloviendo boquetes / sobre
las calles / de mi país.